Piernas bellas y sanas

Las piernas, además de lucir bonitas, deben estar sanas. Se debe intentar reducir la posibilidad de tener varices, para lo cual es importante elevar las piernas después de un largo día de trabajo de pié o caminando, evitar cruzar las piernas, pues ésto dificulta la circulación de la sangre y sobre todo, favorece mucho a las piernas el mantener un peso saludable, pues el sobrepeso da mayor presión a las venas y favorece la aparición de varices.
En caso de que se tengan las piernas muy gordas o muy delgadas, sobre todo en la parte de los muslos y las pantorrillas, podemos ayudarnos con un poco de ejercicio y una dieta acorde a nuestras necesidades, para poder desarrollar músculos en la zona de las piernas que nos interese. Para darles forma y no cargar de mucha presión las venas, son excelentes los ejercicios de bajo impacto, como el yoga o el estiramiento. Y si lo que pretendemos es tonificar las piernas, es bueno practicar la natación, caminar o practicar el ciclismo.
Un problema que surge sobre todo en las mujeres, es la piel de naranja; es decir, la celulitis, que aunque es muy difícil de controlar, puede remediarse en gran manera a base de una buena alimentación, en la que se evitarían las comidas grasas, los carbohidratos refinados y la sal en exceso. También se recomienda beber mucha agua. De todas formas, el ejercicio y un mantenimiento activo concentrándose en la zona donde haya más problemas, es fundamental. Además, existen en el mercado cremas, geles y lociones anticelulíticas que, utilizadas masajeando bien la zona y con constancia, dan resultados a largo plazo.
Para un buen mantenimiento de las piernas y una bella apariencia es fundamental una buena depilación, a no ser que se carezca de vello o éste sea muy fino. Existen varias opciones de depilación. Se pueden utilizar cremas específicas, cera fría o caliente, depiladoras eléctricas o depilación láser.
Si se desea que las piernas luzcan y tengan buen aspecto, no debemos olvidar también utilizar siempre después de la ducha, masajeando suavemente, una buena crema hidratante. Es importante también optar por cremas humectantes que suavizan la piel sin dejarla grasa. Esto es muy importante, sobre todo después de una depilación.
Para pieles que sean un poco ásperas al tacto, es recomendable exfoliarlas cada dos o tres días, bien sea con una esponja vegetal, con jabón o crema exfoliante, ya que de esta forma se eliminarán las células muertas que quedan sobre la piel. Pasada esta fase, nos aplicaremos una crema humectante con efectos dorados, bronceador, con el fin de dar brillo y sensualidad a las piernas.