Si me preguntaran cuál es el viaje que más me ha gustado de los dos últimos años, sin duda, mi escapada a las Islas Baleares. Fue todo un descubrimiento para mi. Había escuchado hablar de sus playas, de sus paisajes, de su gastronomía, pero lo que me encontré cuando llegué allí fue mucho mejor. El carácter amable de sus gentes, familiar y amigable, el clima suave y un sol radiante pusieron la guinda a una escapada que planifiqué a última hora pero que seguro no olvidaré. Menorca es una de esas islas con encanto, pequeña pero con unos paisajes y unas playas preciosas como la playa de Arenal de Son Saura, en Mercadal; o la playa de Atalis, en Es Migjorn Gran, con tan solo diez metros de costa y un enclave de ensueño. En Ibiza debemos conocer la playa de Caló d’en Serra, en Sant Joan de Labritja o la de Cala Carbó, en Sant Josep de sa Talaia. En Mallorca es difícil de escoger por su gran variedad de playas de todo tipo. Una buena elección sería la playa de Caló des Homos Morts, en Santanyí, Mallorca.
En cuanto a la gastronomía, al igual que todo lo demás en estas islas, es estupenda. Las sopas mallorquinas elaboradas a partir de productos de la huerta conbinados con carne, setas u otras hortalizas están exquisitas. También hay que probar el licor de naranjas de Sóller, realizado a partir de naranjas del valle del mismo nombre. Y como no, la típica ensaimada, una delicia para los golosos y no golosos.
En cuanto a qué hacer en las Islas Baleares, también son muchas las opciones. Podemos animarnos a conocer la artesanía de la zona a través de las rutas de la artesanía; o acercarnos al centro ornitológico de Gola-Poyença, en Mallorca, donde los amantes de la naturaleza podrán conocer la aves autóctonas, o al Parque Natural de Mondragó, en Santanyí, Mallorca.
Con respecto al alojamiento, hay hoteles muy asequibles. Además, si planificamos nuestro viaje con tiempo, podemos encontrar ofertas especiales que ofrecen muchos hoteles con la reserva anticipada. Y lo mismo pasa con los vuelos. Si compramos los billetes con bastante antelación pueden salirnos muy baratos. O bien, recurrir a los vuelos de última hora, donde puedes conseguir auténticos chollos, eso sí, hay que estar muy atento y tener la maleta casi hecha para salir corriendo.
Fotografía: Turista en tu pelo
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