Uno de los lugares emblemáticos de la ciudad de La Habana es el bar Floridita. Su importancia no solo radica por ser un lugar muy frecuentado por el célebre escritor estadounidense Premio Nobel de Literatura Ernest Hemingway, ni por su antigüedad, sino por ser el lugar ideal para tomarse un Daiquirí, símbolo cubano por excelencia.
Daiquirí, símbolo cubano
El Daiquirí es un cóctel que encuentra sus orígenes en el interior de Cuba bajo la necesidad de no solamente ofrecer ron local. Su llegada a la capital La Habana y su ligera modificación en el bar la Floridita genera una aceptación de fama mundial. El Daiquirí Floridita contiene 1 ½ onzas de ron blanco, ¼ de onza de jugo de limón, 1 cucharada de azúcar, hielo y 5 gotas de licor de Marrasquino. Se mezcla todos los ingredientes en la licuadora por 30 segundos y se sirve en copas de cóctel.
Hemingway y la Floridita
Un gran difusor del Daiquirí Floridita fue el escritor premio de literatura estadounidense Ernest Hemingway, quien por su paso por La Habana hiciera de la Floridita su bar favorito. En la Floridita Hemingway encontró su deleite en una variación del Daiquirí Floridita que el mismo propuso y que se llamó Papa’s trago o más conocido como Papa Doble.
Así, ubicado en la calle Obispo N° 557 esq. a Monserrate se encuentra desde su inauguración en 1817 el bar Floridita, cuna del Daiquirí. Además de su bar, donde probará los mejores cocteles del mundo (incluido el Daiquirí), también puede almorzar en el restaurante Floridita que funciona desde 1910 y en donde podrá degustar sobretodo de los platos marinos.
Foto: flickr.com/photos/jorgebrazil/7416401668
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