Irlanda, un mundo encantado – Explorando el noroeste

La isla de Irlanda es un paraje de maravillas naturales y de aquellas dejadas por el hombre a su paso que no bastarían unas simples vacaciones para descubrirlas sino parte de su vida. Como solo podemos disponer de un tiempo medido para hacerlo le recomendamos explorarlo de a pocos comenzando por el noroeste.

El Noroeste de Irlanda está representada por tres condados: Donegal, Leitrim y Sligo. Cada uno de estos tres está compuesto a su vez por interminables episodios de belleza natural que esperan ser redescubiertas por sus nuevos y viejos visitantes. Esta franja de Irlanda está compuesta a la vez de elegantes ruinas, cultura e historia.

Donegal

Donegal es el punto más noroccidental de la isla. Gran parte de su litoral esta bañado por el Atlántico, el cual puede ser observado caminando desde sus arrecifes de Sliabh Liag. Como lugar de naturaleza y esparcimiento encontraremos al Parque Nacional de Glenveagh. La ciudad está celosamente vigilada por el Castillo de Donegal, el Doagh Famine Village le contará sobre los tiempos difíciles de Irlanda y la isla de Lough Derg le mostrará el camino de la paz como solían encontrar los peregrinos de tiempos atrás.

Leitrim

Leitrim, por su parte, tiene muy poca extensión de línea costera pero que es muy asediada por surfistas y amantes del mar. Entre las atracciones que podrá encontrar están el tren de Cavan & Leitrim, la Abadía de Creevylea, la Casa de Diseños Leitrim, el Centro Orgánico, las Cataratas de Glencar, el Castillo Parkes y el Centro de genealogía de Leitrim.

Sligo

Sligo se encuentra es el extremo más occidental del noroeste de Irlanda. En él se encuentra uno de los cementerios más antiguos e importantes de Europa que data de 5.000 años A.C., Carrowmore. Si se dirige a Eagles Flying se encontrará con un verdadero santuario de aves de rapiña y lechuzas. Algunos interesantes lugares que visitar son el Centro de música tradicional de Irlanda, el Museo del Condado de Sligo, la Abadía de Sligo (1252/3) y la tumba de W. B. Yeats.

Irlanda en su lado noroeste es fuente de riqueza natural, adornada por lo que el hombre ha podido conquistarle a la naturaleza para entregarle un escenario para el deleite familiar.